El Museo Iconográfico del Quijote (MIQ) invita a explorar 50 años de la plástica mexicana y su evolución representada por artistas contemporáneos que están marcando las tendencias del arte visual en México.

Las exposiciones La huella del tiempo. 50 años de plástica mexicana. 1950-2000 y Bitácoras del extravío, de gráfica, escultura y pintura con cerca de 80 piezas estarán disponibles hasta el 15 de junio.

La huella del tiempo. 50 años de plástica mexicana. 1950-2000 lleva al espectador por un viaje por las vanguardias que han definido parte de la estética contemporánea en nuestro país; una guía a través del Surrealismo, el Realismo Fantástico, el Vitalismo y por supuesto, La Ruptura. Exposición posible gracias a la Colección de Don Alfredo Arévalo Mendoza, coleccionista y amigo de artistas, en colaboración con Galería Manifesto.

Esta exposición plantea una experiencia estética con obras de 35 artistas como José Luis Cuevas, Francisco Toledo, Leonora Carrington, Javier Arévalo, Teódulo Rómulo, Rodolfo Morales, Manuel Felguérez, Chucho Reyes, Federico Silva y Maximino Javier entre otros, en un viaje por las vanguardias a con sus casi 40 piezas escultóricas, pictóricas y gráficas, reconociendo parte de la estética contemporánea en nuestro país.

Hasta el 15 de junio se podrá vivir la experiencia de este viaje a través de las vanguardias y sus máximos exponentes en nuestro país y hacia la exploración del Ser y el diálogo entre artistas  

‘The Palmist’, escultura de Leonora Carrigton que forma parte de la exposición ‘La huella del tiempo.

Bitácoras del extravío, presenta una propuesta contemporánea que reúne tres voces de reconocidos artistas de Jalisco para explorar la tensión entre el ser humano y su búsqueda de sentido, en un viaje a los paisajes que, mediante una dinámica particular de diálogo e interpretación mutua y continua, dio como resultado una colección de más de una veintena de obras.

La exposición propone un diálogo entre los artistas mexicanos José Parra, Ricky Granna y Carlos Larracilla, quienes exploran en torno al ser humano y su búsqueda de sentido teniendo como eje central un políptico de nueve piezas en el que se amalgaman los estilos, motivaciones y cosmovisiones de los tres artistas. En el proceso de creación cada integrante develó una obra original, la cual fue tomada como punto de partida por los otros dos para desarrollar un ejercicio de relectura, realizando una pintura por cada obra matriz.

Esta muestra colaborativa transforma el proceso creativo en un diálogo profundo entre artistas y público, y ofrece una experiencia donde el arte contemporáneo nos embarca a un viaje interior, con preguntas infinitas que nos permiten expandir nuestra conciencia sobre nuestra identidad y trascendencia. Carlos Larracilla, Granna y José Parra forman parte de las figuras más relevantes del arte mexicano actual.

El MIQ es reconocido por contar con la mayor colección de arte visual inspirada en la novela Don Quijote de la Mancha, máxima obra de Miguel de Cervantes, con más de 15 salas con obras de artistas como José Luis Cuevas, Francisco Corzas, Rafael Coronel, José Chávez Morado, Rufino Tamayo, Salvador Dalí, Elvira Gascón, Guadalupe Posada entre muchos otros.

Cada bimestre el MIQ suma a su oferta cultural, exposiciones temporales bajo diversas temáticas, con el objetivo de llegar a los visitantes del museo y generar una experiencia que enriquezca su desarrollo humano a través del arte.

  • Fotos: MIQ