Las protestas contra su política de división y lo laxo de las leyes en el control para la compra de armas, fueron parte de los reclamos que Donald Trump recibió en sus visitas a Dayton y El Paso.
Tras las dos masacres donde murieron 31 personas el pasado fin de semana, las protestas estallaron en las calles durante la visita de Trump a Dayton, Ohio y El Paso,Texas.
“Soy la persona menos racista. El desempleo de negros, hispanos y asiáticos es el más bajo en la historia de Estados Unidos“, tuiteó Trump, un día antes de las visitas, desatando la furia de muchas personas que le acusan de ser promotor de un discurso de odio y racismo que ha incitado a los supremacistas blancos para atacar a los migrantes.
Trump evitó todo contacto con la gente en ambas ciudades; su agenda fue privada y consideró la visita a hospitales donde están algunos heridos que sobrevivieron a las masacres

La primera parada de Trump fue Dayton, Ohio una pequeña ciudad donde Connor Betts, un hombre de 24 años, abrió fuego con un fusil AR-15 contra los asistentes a un bar, dejando un saldo de 9 muertos –entre ellos su hermana- y 27 heridos.
Inconformes con la visita del Presidente, ciudadanos salieron a las calles portando pancartas contra el uso de armas, consignas políticas y un bebé inflable con la imagen de Trump –similar al usado por inconformes en su visita a Londres-.
Horas luego Trump hizo escala en El Paso, Texas, donde un hombre de 21 años concretó una masacre, en el centro comercial Walmart, alentado por los discursos de odio y racismo. La ofensiva brutal de Patrick Crusius, armado de un fusil AK-47, contra la “invasión hispana” dejó como saldo 22 muertos y 24 heridos.
Después de tuitear por la mañana cínicamente sobre el hecho de que su retórica “une más a la gente” en Estados Unidos, Trump provocó nuevamente una polarización social en El Paso, tras un mensaje contra uno sus oponentes políticos que ha estado criticándole por su discurso de odio y racismo.
“Beto, nombre falso para indicar origen hispano (sic), O’Rourke, que está avergonzado por mi última visita al gran Estado de Texas, donde le aplasté, y está ahora aún más avergonzado por los sondeos que le dan un 1% del voto en las primarias demócratas, ¡debería respetar a las víctimas y las fuerzas de seguridad y callarse!”, tuiteó Trump en un agresivo mensaje tras la visita a El Paso.
“Veintidós personas han muerto en mi ciudad por un acto de terror inspirado por tu racismo. El Paso no se callará y yo tampoco”, le respondió O’Rourke.
- Fotos: AP
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