Decenas de sinaloenses hartos por la violencia de los narcos y la débil respuesta del Estado ante el asesinato de dos niños y su padre, irrumpieron en el Palacio de Gobierno y causaron destrozos en protesta contra el gobierno del morenista de Rubén Rocha Moya.
El asesinato de los niños ocurrió el pasado domingo cuando Antonio Sarmiento fue interceptado por narcos para robarle su vehículo. Los criminales terminaron matándolo junto a dos de sus hijos e hiriendo a otro menor de edad.
Ante el crimen, la comunidad escolar de la escuela primaria ‘Sócrates’ de Culiacán convocó a una marcha pacífica para exigir justicia por el asesinato de Alexander, de 9 años, de su hermano Gael, de 12 años, y su padre, Antonio de Jesús, de 40 años y para que pare la violencia en Sinaloa.
“Queremos que esto ya se acabe y si este gobierno no tiene el poder de hacer que algo cambie, que se vaya. Si (Rubén Rocha Moya) no tiene lo que tiene un hombre, que se vaya y que llegue alguien más que pueda arreglar esta situación o cuando menos mantenernos en paz”, declaró Víctor Hugo Aispuro, director del colegio ‘Sócrates’, a medios locales de comunicación.
Vestidos de blanco, con flores, veladoras y carteles, cientos de manifestantes exigieron la salida del gobernador morenista Rubén Rocha Moya a quien le gritaron consignas como: “¡Narcogobernador!” o “¡Fuera Rocha!”.
La ira social se desató luego de la negativa del Gobernador Rocha Moya para atender y dialogar con una comitiva, luego de la marcha pacífica donde miles de personas salieron a protestar al grito de “¡Con los niños NO!”

El grupo de manifestantes destrozó puertas, cristales, muros y muebles del Palacio de Gobierno de Sinaloa luego que el Gobernador, integrante del partido Morena, se negó a recibirlos
Sinaloa cumple más de cuatro meses seguidos de violencia desbordada con asesinatos, desapariciones, narcobloqueos y balaceras sin que las autoridades estatales o federales asuman el control para frenar la narcoviolencia.
El enfrentamiento entre narcos, que afecta a los ciudadanos, se desató al partirse el Cártel de Sinaloa tras la captura de Ismael El Mayo Zambada y los hijos de su compadre y ex socio El Chapo Guzmán. Los llamados Chapitos engañaron a El Mayo y lo entregaron a la DEA en Estados Unidos a fin de negociar con el gobierno estadounidense para no purgar cadena perpetua.
El gobernador Rubén Mocha Roya ha sido señalado por el narco Ismael El Mayo Zambada como su “amigo” y está presuntamente vinculado con el secuestro del capo, además del asesinato de su rival político Melesio Cuén, luego que todos se iban a reunir para ‘arreglar’ problemas políticos hace cuatro meses.
“Me enternece mucho eso, los niños y el papá, porque finalmente queda la señora sin sus seres queridos. Es muy lamentable”, declaró Rocha Moya a medios de comunicación.
El gobierno federal aseguró que se hará cargo del caso.
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