El intento de un grupo de indígenas emberas para tomar las instalaciones del edificio Avianca, en Bogotá, Colombia, terminó en un zafarrancho en donde apalearon y apedrearon a policías que respondieron con gas lacrimógeno y cargas.

Los indígenas, integrantes del grupo Autoridades Indígenas en Bakatá (AIB), protestaban por falta de agua y atención sanitaria en la región de La Rioja. La intervención policíaca desató el caos y todo terminó a golpes y palizas.

La ausencia de diálogo siempre genera más violencia. Rechazo y condeno los actos vividos hoy en Bogotá. Varios miembros de la Fuerza Pública y civiles resultaron heridos. Nunca será protesta la agresión a un policía”, tuiteó el presidente de Colombia, Gustavo Petro.

El balance oficial de las autoridades, es de 27 heridos, entre los que se encuentran 14 policías, 8 gestores de convivencia y 5 civiles, según reporta el diario colombiano El Tiempo.

La alcaldesa Claudia López rechazó las agresiones de los indígenas, para luego advertir que los responsables serán procesados judicialmente.

Esto no es protesta social! Es violencia inaceptable, que no debe quedar impune! La impunidad al abuso y violencia solo incentiva su reproducción. Así como he denunciado y hecho judicializar abusos de miembros de la fuerza pública, haré lo propio con esto”, tuiteó la Alcaldesa López, quien recriminó previamente ante medios locales que su gobierno ha apoyado incondicionalmente durante más de dos años a los emberas, con refugio y ayuda humanitaria.

El enfrentamiento entre indígenas y policías comenzó luego del mediodía en el centro de Bogotá, que terminó convertido en un gran campo de batalla con una nube de gas lacrimógeno y cargas policíacas

Tras el zafarrancho, Jairo Montañez coordinador técnico de Autoridades Indígenas en Bakata (AIB), lamentó los hechos. Aunque justificó que los indígenas emberas ‘respondieron’ ante la inicial agresión policíaca.

Uno de los once puntos de indígenas decidió movilizarse ante la situación de vulneración de derechos que hay en la UPI La Rioja. No hay flujo de agua de agua de forma constante, los baños no tienen la capacidad, las enfermedades siguen proliferando y algunos niños siguen muriendo. 

El Esmad (Escuadrón Móvil Antidisturbios) luego de haber recibido la orden del señor alcalde local de la localidad de Santa Fe, Daniel Herrera, accionaron con aturdidoras. En el marco de todo esto fue muy desafortunado el hecho que se presentó con la auxiliar de policía. No debió pasar. Desafortunadamente desencadenó una situación de agresiones y de violencia tanto para la población indígena como también para algunos funcionarios de la policía”, declaró Montañez a medios locales.

Por lo pronto la Secretaría de Gobierno de Colombia anunció una recompensa de 50 millones pesos colombianos (alrededor de 10 mil 500 dólares) a quienes ofrezcan información para capturar a los agresores de los policías, luego de informar que se detuvo a dos participantes en los ataques a palos y pedradas.

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