Israel abrió un nuevo frente de guerra, que se suma a Gaza y Líbano, al bombardear este domingo Yemen, país cuyas milicias rebeldes hutíes han lanzado misiles contra los israelíes en apoyo a Hamás y Hezbolá.

El saldo preliminar en Yemén, tras los bombardeos a la ciudad portuaria de Hodeidah, es de seis muertos y al menos 87 heridos según reportan medios yemeníes.

Los rebeldes hutíes han estado atacando a Israel con misiles desde el año pasado y el último ataque fue el pasado sábado con un misil balístico contra el aeropuerto Ben Gurion, en la capital Tel Aviv, que dejó una persona muerta y 10 heridas.

Además de los daños al puerto de Hodeidah, en el Mar Rojo,  los bombardeos de Israel destrozaron una refinería e infraestructura eléctrica, provocando un gran incendio en la zona.

“(Este ataque) deja claro a nuestros enemigos que no hay lugar al que no llegue el largo brazo del Estado de Israel (…) El puerto que atacamos no es un puerto inocente. Se utilizó con fines militares, se utilizó como punto de entrada de armas mortíferas suministradas a los hutíes por Irán”, declaró a través de un comunicado, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, según registran diversas agencias de noticias internacionales.

A la par del bombardeo a Yemen, Israel también atacó nuevamente varias zonas del Líbano, donde murieron 53 personas este domingo -32 personas en la ciudad de Ain Deleb y 21 en la ciudad de Baalbek-Hermel- y casi un centenar de heridos tras los bombardeos

A primera hora de estelunes, Israel bombardeó nuevamente Beirut, capital de Líbano, causando muertes y heridos aún no cuantificados.

Desde hace una semana, Israel ha sostenido bombardeos contra posiciones de la milicia chií Hezbolá, en Líbano, asesinando en el último bombardeó sobre Beirut, la capital del país, a Hasan Narsralá líder máximo de esta agrupación terrorista.

Irán, principal enemigo de Israel y quien financia el apoyo a Hamás (Gaza), Hezbolá (Líbano) y los rebeldes hutíes (Yemen) solicitó  ayer una reunión emergente del Consejo de Seguridad de la ONU para abordar los ataques de Israel que abrió un nuevo frente de guerra.

Los desplazaos de Líbano ya suman 1 millón de personas, la gran mayoría se han refugiado en Siria para evitar morir ante los bombardeos de Israel. Mientras que en Gaza la matanza israelí ya rebasa los 41 mil palestinos muertos y pocomásde 96 mil heridos desde que estalló la guerra contra Hamás, en Gaza, el pasado 7 de octubre de 2023.

El temor a que la guerra se extienda en Medio Oriente por la intervención de Irán sigue incrementándose. Por lo pronto y sorpresivamente Arabia Saudita, país aliado de Israel y Estados Unidos, declaró ayer su apoyo a Líbano y su población, según registra la agencia Reuters, asegurando desde el Ministerio de Asuntos Exteriores, que la soberanía del país árabe debe ser respetada por Israel.

  • Fotos: CNN/AP
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