Las protestas han vuelto a sacudir las calles de Haití donde la gente, harta, ha salido a protestar para exigir la dimisión del presidente Jovenel Moïse.

La negativa del Presidente Moïse para entregar el poder este domingo ha desatado un nuevo caos en diversas ciudades de Haití, donde la violencia escala acompañada de destrozos, cargas policiacas y detenciones arbitrarias.

Me quedan 364 días en el poder. No habrá transición”, ha dicho Jovenel Moïse en un mensaje a la nación luego que el domingo el Consejo Superior de Poder Judicial de Haití dio por terminado su atropellado mandato, según registra la agencia EFE.

El alzamiento contra el gobierno se exacerbó tras la detención del juez Ivickel Dabrésil, a quien el gobierno acusa de orquestar un “golpe de Estado”.

Ayer Moïse publicó un decreto presidencial para jubilar de facto a tres jueces opositores, entre ellos Dabrésil y Joseph Mécène Jean Louis, quien este lunes se proclamó presidente interino del país en medio del caos y la violencia.

El desorden social en Haití deriva de las opiniones encontradas entre gobierno y oposición respecto al final del mandato de Moïse; la oposición dice que concluyó el domingo y él asegura que le falta un año más

El estallido de la violencia vuelve al país más pobre de América ante el hartazgo por un gobierno corrupto y dictatorial.

Nadie se pone de acuerdo sobre el tema debido a las interpretaciones que cada bando le da a un artículo de la Constitución de Haití, luego que en 2015 se anularon las elecciones y en 2016 se reanudaron. El mandato presidencial es de cinco años, por lo que Jovenel Moïse alega que como juramentó en 2017 le falta un año más para entregar el poder.

Las revueltas y el caos en la isla comenzaron el 7 de febrero de 2019, luego de protestas violentas en las calles por gente harta de la corrupción que encabeza el presidente Jovenel Moïse. En enero de 2019 el Tribunal Superior de Cuentas reveló que se habían desviado unos 2 mil millones de dólares a través de la paraestatal Petrocaribe, mientras la gente sufría hambre.

Las mismas escenas de febrero de 2021, con marchas, calles con barricadas e incendios son el panorama desolador que se muestra hoy en Puerto Príncipe, la capital de Haití, y otras ciudades del país más pobre de América.

Para avivar aún más el caos, Moïse anunció que en abril se aprobarán reformas a la Constitución para permitir la reelección presidencial por dos periodos consecutivos, algo que estaba prohibido tras la caída de la dictadura de los Duvalier -François y su hijo Jean-Claude- que duró desde 1964 hasta 1986.