Las tropas del ejército sirio de Al Asad tienen ya el control de Alepo, salvo aisladas bolsas de resistencia. Los rebeldes han perdido su mayor feudo urbano.                                                                                                         

La conquista de Alepo es también el triunfo de Putin. La intervención de la aviación rusa resultó definitiva para que el Gobierno sirio de Al Asad recuperara la capital burguesa del país y cuna de la aristocracia empresarial. Una ciudad que ha vivido un asedio cruento e indiscriminado con la complicidad de la comunidad internacional, siempre endeble cuando se trata de tomar medidas contra las grandes potencias.

La población civil ha vivido con hambre y frío uno de los episodios más trágicos de la historia reciente. Algunos historiadores lo comparan ya con el cerco de Stalingrado. La Media Luna Roja Siria confirmó que todos los hospitales han sido evacuados y los civiles se encuentran ya en la zona este de la ciudad controlada por el ejército sirio. Se estima que unos 16 mil niños han perdido la vida desde el inicio de este cruento conflicto.

Al Asad, con el apoyo de Putin, logra  su primera gran victoria contra la insurgencia  y, gracias al trabajo de la aviación rusa, controla las cinco principales ciudades

“Los disparos al aire y el ruido de las bocinas de coches inundaron la ciudad siria de Alepo para celebrar su reunificación”, dijo un residente en la parte occidental de la ciudad citado por las agencias de noticias. La guerra civil desatada tras las revueltas contra el régimen de marzo de 2011 se ha cobrado la vida de 310.000 personas, de las que 90.000 eran civiles, incluidos 16.000 niños, según los datos de la ONG Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, con sede en Reino Unido.

La contraofensiva del ejército sirio estuvo apoyada desde el aire por la aviación rusa desde septiembre de 2015  y por tierra por las milicias chiíes de Afganistán, Irán y Líbano. Todo parece indicar que tras la caída de Alepo, y en el sexto año de guerra, el régimen sirio podrá acelerar sus avances para volver a tomar el control del país. La batalla de Idlib, feudo rebelde al norte del país, será el siguiente capítulo de este macabro episodio de la historia.