Jean-Baptiste Huynh refleja con maestría y belleza uno de los elementos primigenios más poderosos que ha fascinado al hombre desde siempre. Haciendo que cobre vida a través de chispas, brasas o flamas.
Huynh (Francia) hipnotiza con la captura de un símbolo atemporal que lo mismo es fuente de luz, danza calórica o erótica, estallido en flor o pájaro en llamas: el sagrado fuego.
“Este es un estudio del fuego en todas sus formas; elemento absoluto y ancestral, que ha acompañado a todas las grandes invenciones humanas”, ha dicho Huynh sobre esta serie.
Ruleta Rusa te sugiere escuchar, mientras observas las imágenes y lees, la deslumbrante sonoridad de Nina Simone y la poesía erótico-amorosa de Enrique Rangel.
La flor de fuego
Para A.B.
Rómpeme
Mi cuerpo te reclama con su pulsar
sofocado
de cielo ausente
Ojos abiertos
como la inmensidad del océano
enloquecido
intentando atrapar tu magnitud de Sol
convulsamente
Incéndiame
no dejes hueso sobre hueso
arrójame al abismo
entre tus piernas la flor de fuego
disolviéndome
Enrique Rangel