Una de las ciudades ultraconservadoras de México tiene al ícono gay más famoso como santo patrono. En el escudo de armas de León, Guanajuato aparece San Sebastián.

León ha sido catalogada desde el siglo pasado como una ciudad de ‘mochos’ (santurrones o hipócritas que aparentan ser devotos). Algo que no ha impedido a la comunidad Lésbico, Gay, Bisexual, Transgénero, Travesti, Transexual e Intersexual (LGBTTTI) avanzar en la búsqueda de tolerancia, bajo el amparo de San Sebastián.

San Sebastián se ha constituido como el santo patrono de la comunidad gay e incluso se ha promovido que la Iglesia Católica así lo reconozca, por colectivos y organizaciones que aglutinan a católicos con preferencias sexuales diversas.

En agosto de 2011, el comité organizador de la II Feria Internacional de los Negocios y del Turismo Gay, ExpoGays, celebrada en España, hizo la petición formal al Papa Benedicto XVI –que estaba de gira por España- para que se reconociera a San Sebastián como ‘Patrón de la comunidad gay-lésbica’.

De acuerdo a ExpoGays, el argumento se daba a partir del reconocimiento que la comunidad LGBTTTI ha hecho al mártir romano que murió flechado y “para que los creyentes homosexuales también tengan cabida en el seno de la Iglesia Católica y puedan vivir su fe sin que tengan que sufrir la secular marginación impuesta desde Roma”.

La motivación partió a raíz del culto que comenzaron a profesarle, desde el siglo XIX, integrantes de la comunidad gay, según el registro que hace Richard A. Kaye, quien escribió que “los hombres gays contemporáneos han visto inmediatamente en Sebastián un anuncio conmovedor del deseo homosexual (de hecho, un ideal homoerótico) y un retrato prototípico de un caso en el armario torturado“.

San Sebastián ha sido asociado siempre como patrono protector de las epidemias, pestes, y desde el siglo XIX como protector de la comunidad gay

 

San Sebastián es venerado por la comunidad gay desde el siglo XIX.

Tony De Carlo, un artista contemporáneo, comenzó a generar un revuelo en los 80 con su serie ‘San Sebastián’ para llamar la atención sobre la comunidad lésbico-gay y la crisis del VIH/SIDA. Pero hasta 2001, asegura, se dio cuenta de un detalle que le dejó impactado.

Lo elegí porque era conocido como el santo patrono y protector contra la peste que se extendía por Europa“, declaró De Carlo en una entrevista para el blos Jesus in Love [Jesús enamorado]. “No fue hasta el año 2001, cuando entré en una santería católico-romana de Nuevo México [EE.UU], que tomé una estatua de peltre de San Sebastián, y vi una etiqueta en la parte inferior que decía ‘Patrono de los homosexuales‘”.

En la ciudad de León el movimiento LGBTTTI ha logrado hacer respetar, no sin amplios esfuerzos, el avance de las reformas que muestran a esta ciudad ultraconservadora o de ‘mochos’, como una metrópolis que se moderniza y donde la tolerancia ya es visible.

La primera boda gay celebrada en León se dio el 18 de marzo de 2014, cuando un par de mujeres lograron –tras ganar un amparo- que se aceptase legalmente su unión en el Registro Público. Eso abrió la puerta a nuevos matrimonios.

Las bodas entre parejas del mismo sexo son ahora algo normal, e incluso la página de Facebook Colectivo León Gay A.C., se encarga de difundirlo y celebrarlo

Pero no sólo en León se ha logrado un avance respecto a los derechos del matrimonio, aquí también se ha dado la primera custodia de un bebé para una pareja gay, mucho antes de los matrimonios.

Fue hace como ocho años, antes de que fuera novedad los matrimonios entre personas del mismo sexo, en Guanajuato el Tribunal obligó a que se diera en custodia (a una pareja gay)”, reveló en agosto de 2015, Rito Padilla García, director del Registro Civil de Guanajuato.

Aunque fue en 2016 cuando una pareja gay leonesa, el segundo matrimonio gay en Guanajuato, concretó la formación de una familia homoparental, luego que convencieron a una amiga de rentar su vientre y recibir inseminación artificial –con el esperma que entregaron ambos y sin pretender saber de de quién fue el esperma que logró fecundar el óvulo -; así nació la pequeña Farah.

San Sebastián ha protegido a León desde su fundación, el 20 de enero de 1576 –donde, por cierto uno de sus dos alcaldes era mulato y defensor de los negros-, y lo sigue haciendo a 441 años de ello. Una prueba es que la comunidad LGBTTTI lo tiene como santo patrono también, y ha logrado que prevalezca la tolerancia.

  • Fotos: Ruleta Rusa