La Real Academia de la Lengua Española (RAE) se adapta a la velocidad de los tiempos que corren desbocados a través de fibra óptica, de cables HDMI, de  sensores IoT; inmaterial tiempo fugaz, delirante, encriptado, medido en teras, en ancho de banda.

 

Llegó la araña que el idioma daña /  la Real Academia yo se la dejo a España
Tango del Pecado.Calle 13

I

Posverdades y hackers

El miércoles 20 de diciembre la RAE lanzó la actualización digital de su 23ª edición del Diccionario de la Lengua Española. El idioma tuvo 3 mil 345 modificaciones con respecto a la edición de 2014. No habrá que esperar esta vez por la edición impresa para que los cambios al español surjan efecto.

Para que el español no siguiera como el tío anacrónico que desea usar expresiones de ‘chavo’ con sus sobrinos, la RAE sumó palabras de uso común (posverdad, chicano, hummus, clic, incluso el vallenato colombiano) y agregó a otras, acepciones no consideras. La expresión ‘sexo débil’ al fin es clasificada como peyorativa.

Otro de los cambios de particular relevancia es el aplicado a la palabra hacker, incluida en la actualización de 2014. Hoy cuenta con un nuevo significado además de la incompleta primera acepción que los enjuiciaba como “piratas informáticos”. Con esta última actualización, un hacker ahora también es una “persona experta en el manejo de computadoras, que se ocupa de la seguridad de los sistemas y de desarrollar técnicas de mejora”.

Julian Assange, Edward Snowden y Chelsea Manning, los próceres que emergieron en la primera década del siglo XXI para explicar al mundo que Estados Unidos poseía un robusto sistema de espionaje dirigido no solo a sus propios ciudadanos sino a todo el mundo, hoy, al menos en español, son más que piratas y se convirtieron en expertos que se ocupan de la seguridad de los sistemas.  Es importante conocer a estos tres hackers que han luchado para que nadie haga el inmoral uso de la tecnología que hace el gobierno estadounidense, y de esta forma debatir las leyes que regulan al salvaje y peligroso viejo oeste que es Internet.

Inicialmente los hackers fueron calificados como ‘piratas cibernéticos’.

 

II

¿Ahora pueden oírme? Nos espían. 

El hacker Snowden nos los ha advertido a gritos. A Edward Snowden (1983) podría incluírsele en la categoría de hacker en las dos acepciones de la RAE. El Gobierno de Estados Unidos, su ex empleador, lo persigue y de ser capturado podría purgar cadena perpetua.  Este experto en seguridad estadounidense para la CIA y ex empleado de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) del gobierno de Estados Unidos, fue testigo de cosas que no toleró más.

Se convirtió en pirata al filtrar documentos clasificado como “de alta seguridad” en los que revelaba la existencia de un programa clandestino de vigilancia electrónica denominado PRISM, operado por la NSA.  Al menos nueve grandes compañías de internet, entre ellas Facebook, Google, Microsoft, Apple, Yahoo, fueron evidenciadas como proveedoras de información privada de sus usuarios a los servicios de inteligencia estadounidense.

Los diarios The Guardian y The Washington Post recibieron en exclusiva por parte de Snowden esta información en 2013, año en que tuvo que escaparse de Estados Unidos hacia Hong Kong para después solicitar refugio a Rusia, mismo que le fue concedido y extendido por el gobierno Vladimir Putin en enero de este año hasta 2020.

La trepidante historia de este hacker heroico es contada con belleza y minucia en el documental Citizenfour (alias que usaba Snowden para no ser rastreado),  dirigido por Laura Poitras, trabajo ganador de diversos premios entre ellos el Oscar y los Premios BAFTA.  En una entrevista para la NBC en 2014, Edward Snowden aseguró que “los espías del Gobierno pueden hacer que tu teléfono ‘se haga el muerto’ y aun apagado entrar en él y obtener toda la información“. También señaló que las televisiones pueden y fueron usadas para espiar a civiles así como las cámaras de las computadoras.

Edward Snowden, abrió una nueva ruta a la rebelión contra el control gubernamental en la web.

No quiero vivir en un mundo donde todo lo que digo, todo lo que hago, todo lo que hablo, toda expresión de creatividad o de amor o de amistad queda grabada (…) El mayor temor que tengo respecto a las consecuencias para los Estados Unidos de las divulgaciones es que nada vaya a cambiar. Tras meses y años se pondrá peor, hasta que llegará el momento en que las políticas cambiarán, porque la única cosa que restringe las actividades de un Estado de Vigilancia son las políticas”.  Edward Snowden

Sobre el escándalo de Pegasus, un programa comprado y usado por el gobierno mexicano para espiar a periodistas y activistas documentado por el New York Times y publicado en junio de 2017, Snowden declaró que no tenía duda de la participación de la administración de Enrique Peña Nieto en esta prácticas que calificó de antidemocráticas.

No me sorprendió la información, pero no es acerca del espionaje, es acerca de democracia, y lo que significa que el gobierno tome decisiones por nosotros y redefina los límites de la privacidad (…) En una democracia deberíamos saber todo del gobierno y ellos poco de nosotros, a menos de que seas un criminal, pero no es así”, declaró en una videoconferencia que ofreció en el evento tecnológico TAG CDMX 2017.

En septiembre de 2015, desde algún lugar en Rusia, Snowden lanzó su cuenta de Twitter, desde la que hace activismo y difunde información sobre tecnología, espionaje y derechos de los usuarios de internet. Su perfil indica que “antes trabaja para el gobierno, ahora para el público” y que es presidente de Freedom of the press, una organización sin fines de lucro “dedicada a apoyar y defender el periodismo de interés público enfocado en exponer la mala gestión, la corrupción y la violación de la leyes en el gobierno”.

¿Ahora pueden oírme? fue el primer tuit cargado de ironía desde su cuenta que hoy suma a poco más de 3.5 millones de personas y en la que solo sigue, provocativamente a @NSAGov. Sería bueno que más escucháramos a este hacker.

Argumentar que no te importa el derecho a la privacidad porque no tienes nada que esconder es como decir que no te importa la libertad de expresión porque no tienes nada que decir

Edward Snowden

 

La figura del hacker se ha convertido en un referente de antihéroe contemporáneo.

 

III

Los sombreros de los hackers 

En el mundo hacker existen categorías.

La ‘taxonomía’ más aceptada y difundida los divide en: hackers sombrero blanco, gris y negro. Estos términos comenzaron a utilizarse justo en el año en que la palabra fue aceptada por la RAE (2014) y diferencia las actividades de los hacker que pertenecen a cada categoría.

Los hackers de sombrero blanco buscan, descubren e investigan fallas de seguridad en el software. Digamos que son los buenos. Los hackers sombrero negro infectan de malware, exploits, gusanos, troyanos, etc. sistemas operativos para detectar fallas de seguridad del software y las aprovechan en su propio beneficio. Son los malos. Y existen los sombrero gris, que buscan fallas no para robar o ayudar a otros, sino para vender la soluciones de estas vulnerabilidades a organizaciones o gobiernos.

¿Sombrero blanco, negro o gris? Es la nomenclatura de los hackers en la actualidad.

 

IV

Assange: todo por la transparencia 

Dicen que su pelo se volvió totalmente blanco durante la disputa con su ex esposa por la custodia de su hijo. Dicen que a los 16 años, en 1987, cuando el internet era ficción, ya comprendía los más barrocos vericuetos de la informática. Dicen que por años su nombre de hacker fue Mendax, inspirado en la frase del poeta Horacio, splendida medax que podría traducirse como “falso por un buen fin“. Dicen que nadie sabe con precisión su fecha de nacimiento. Él dice que sabe toda la verdad y lo demostró al hacer la mayor filtración de información de la historia.

Julian Assange es un hoy una figura de la mitología humana. El mayor hacker y activista, que antes de los treinta ya era una especie de gurú ciberpunk coautor del libro Underground (1999) , fundó WikiLeaks en 2006 con el objetivo de “recibir filtraciones que desvelen comportamientos no éticos ni ortodoxos por parte de los gobiernos, con énfasis especial en los países que considera tienen regímenes totalitarios, pero también en asuntos relacionados con religiones y empresas de todo el mundo”.

El 5 de abril de 2010 WikiLeaks (palabra compuesta del hawaiano; wiki –rápido-, y del inglés: leak –fuga, goteo, filtración-), asestó su primer golpe mediático al difundir un video de 2007 en el que se ve cómo soldados estadounidenses disparan al reportero de Reuters Namir NoorEldeen, a su ayudante y a nueve personas más, algunas de ellas cuando posteriormente iban a llevarse a los muertos y heridos. Aunque la agencia Reuters solicitó en numerosas ocasiones el material, les fue negado hasta que WikiLeaks lo consiguió para desnudar al  aparato militar de Estados Unidos.

Desde entonces Assange ha tenido que vivir escondiéndose. Es considerado por el gobierno de su país como una “amenaza a la seguridad nacional” y desde el martes 19 de junio de 2012 vive encerrado en la embajada de Ecuador en Londres.

“Estoy arrestado desde hace cinco años en Reino Unido sin cargos. Es un periodo difícil para mí y mi familia, pero mi trabajo ha continuado y Wikileaks también continúa (…) Facebook es la máquina de espionaje más escandalosa que se ha inventado nunca”

Julian Assange

Julian Assange, el nuevo insurgente de la web vive encerrado en la Embajada de Ecuador ante la persecusión política en su contra por el gobierno de Estados Unidos.

 

V

Dos mundos

Chelsea Manning, que nació como Bradley Edward Manning, es una ex soldado y analista de inteligencia transgenero del ejército de EE.UU. y, en uno falso disco de Lady Gaga, sustrajo medio millón de documentos de la armada estadounidense entre ellos, el video que WikiLeaks llamaría Asesinato Colateral, en el que se muestra la muerte de un reportero de Reuters y de otros civiles cuando la tripulación estadounidense dispara como si se tratara de un videojuego.

Manning fue detenido en 2010 y condenado en 2013 a cumplir una pena de 35 años de cárcel, sin embargo, el 17 de enero de 2017, el presidente Barack Obama, en sus últimos días antes de abandonar la Casa Blanca, conmutó el resto de la pena de prisión de Manning, quien salió de prisión el 17 de mayo de 2017.

Su activismo ha disminuido, pero en su primera entrevista con la cadena ABC señaló que “había dos mundos. El mundo en América, y el mundo que estaba viendo (en Irak). Quería que la gente viese lo que estaba viendo”.

VI

La RAE, tres años después, enmienda el error

El debate sobre la primera acepción que la RAE otorgó a la palabra hacker generó controversia desde su inclusión en el diccionario de la RAE “como un anglicismo no adaptado al español” ocurrida en 2014 . En ese momento, el español Chema Alonso, uno de los hacker con mayor prestigio en el mundo, lanzó una petición en la plataforma Change.org para no criminalizar el término al colocarlos como ‘ciberdelincuentes’ cuando, “gracias a su pasión por buscar los límites de las tecnologías han mejorado nuestro tiempo“.

La BBC, en ese momento, intentó contactar a la RAE para tener su versión  respecto a al polémico término pero “declinó comentar la controversia y añadió que en su página web hay un apartado para realizar sugerencias y propuestas”.

La RAE enmienda su error, tres años después, aunque en el Cambridge English Dictionary, los hackers aún sean “piratas informáticos” no solo a través de computadoras, también al intervenir teléfonos y hacer escuchas ilegales de mensajes privados.

La figura de los hackers ha llegado hasta los videojuegos.

Y mientras los hackers se convierten en materia de estudio, videojuegos y hasta persecución política, WikiLeaks asegura -desde marzo de 2017- haber obtenido los detalles de un programa de hackeo de teléfonos, computadoras y televisores por parte del espionaje de Estados Unidos, y comenzó a filtrar miles de documentos relacionados que atribuye a la CIA.

Acusa la existencia del programa Año Cero, que incluiría toda una serie de armas informáticas para poder hackear teléfonos y dispositivos producidos por compañías estadounidenses, como los iPhone de Apple, Android de Google, el Windows de Microsoft o los televisores Samsung con conexión a Internet, que se convertían en micrófonos encubiertos a través de los cuales espiar a sus usuarios.

Assange ha declarado que cada movimiento que realice el gobierno, la ciudadanía debe conocerlo. Toda la información pública. No solo la que ellos elijan.

  • Fotos: Especial