¿Tocarse o no tocarse los senos y practicarse o no una mastografía? Este dilema marca una gran diferencia entre la vida y la muerte. El cáncer de mama no respeta ideologías religiosas. Simplemente mata.
En Guanajuato capital se está sembrando una semilla para desterrar los tabús asociados al cáncer de mama. Apenas es un comienzo, pero así se inician los grandes cambios.
Quizá los resultados no sean visibles sino en el mediano o largo plazo, pero de entrada hay una nueva forma de abordar este problema de salud que de enero a agosto de este año ha cobrado la vida de 208 mujeres en el estado, según cifras de la Secretaría de Salud. Y un hombre. Sí. Los hombres no son inmunes a este mal.
Lourdes Gazol Patiño es una socióloga y activista feminista. Hoy que dirige, desde hace 10 meses, la Dirección de Atención a la Mujer Guanajuatense, no está dispuesta a cruzarse de brazos y por ello ha instaurado como un programa permanente la detección y atención al cáncer de mama.
“Pensar en hablar de cáncer, para muchos, nos cuesta trabajo pensar que sea sinónimo de vida, siempre pensamos que es sinónimo de muerte. Algo que me ha quedado claro este mes es que no es cierto, que tenemos que cambiar esta concepción de que el cáncer de mama no es sinónimo de muerte (…)
“Tenemos que seguir replanteando esto (…) porque tocarnos el cuerpo siempre ha sido sancionado, por nuestra cultura. No te toques (…) Ya es una avance ver espectaculares donde vemos las mamas. Nosotras pusimos dos mamparas con el diseño de las mamas y la autoexploración. Yo dije híjjole a ver si eso no es objeto de sanción por la población guanajuatense. No nos sancionaron y sobre todo no se vandalizaron esas mamparas”, dice Gazol, una mujer madura de ideas frescas, que tiene un largo historial de trabajo en favor de las mujeres. Y también controversias. Quizá por ello se atrevió a ‘romper otra vez el molde’ con la reciente campaña para la detección del cáncer de mama.
Apostando por el enfoque lúdico y abordando por primera vez el tema entre estudiantes de primaria, la campaña de prevención también tuvo charlas, conferencias, intervención en comunidades rurales, una feria de servicios y eventos simbólicos -como la iluminación en rosa de la Plaza de la Paz-, así como una función de cine para abordar el tema.

Gazol fue de las iniciadoras del Instituto de las Mujeres Guanajuatenses (IMUG) que hoy dirige con solvencia y resultados la abogada Anabel Pulido, otra figura importante en este avance que tiene Guanajuato para la protección de sus mujeres que representan poco más de la población total.
“Creo que debemos de empezar a cambiar nuestra visión, como mujeres, de que hay algo malo en autoexplorarse. Quitar esos tabúes de no tocarse, porque eso hace que no haya comunicación entre madre e hija, todo lo que enfoca la sexualidad tiene que dejar de ser tabú, eso ayudaría no sólo a la prevención del cáncer de mama, sino de otras cosas como embarazos no deseados”, dice Yazmín Pérez Martínez, una estudiante de Enfermería que tiene 23 años de edad y le da la razón a Gazol respecto a que el mayor problema es que se le ha enseñado a la mujer que tocarse o hablar de su cuerpo es ‘malo’.
En Guanajuato, según el último censo de 2015 que realizó el INEGI, se ha registrado una población de 5.8 millones de habitantes, de los cuales el 51.7 % son mujeres

En el 2016 se registraron oficialmente 303 muertes por cáncer de mama en mujeres y 4 muertes de hombres por la misma causa. Pese a las campañas permanentes de difusión, aún muchas mujeres no terminan de entender la importancia de la autoexploración, o se dejan llevar por mitos que impiden un cuidado integral de la salud.
“Yo no entendía la importancia de revisarse hasta que me dio un derrame cerebral, hace 13 años, y de ahí me empecé a preocupar más por mi estado de salud. Desde entonces me revisó y voy al médico. Estoy tratando de convencer a mi hija de que haga lo mismo, y espero lograrlo”, dice la señora Elia Rocha Luna, quien a sus 60 años de edad sabe que el cáncer de mama es un verdadero peligro.
Adriana Corral Hernández, una de las colaboradoras de Gazol, considera que el integrar elementos lúdicos en los programas de prevención está dando resultados, especialmente porque han decidido enfocar los esfuerzos en la población joven, para ir sembrando la conciencia y evitar en el futuro que la ignorancia gané y produzca con ello más muertes.
“La forma en que nos acercamos a los más pequeños es a través del juego. Eso ayuda mucho a que comprendan un tema complejo como este”, considera Corral quien ha diseñado diversos artículos para las charlas y ferias de servicios, y junto con Gazol parte del programa de prevención.
La Dirección de Atención a la Mujer Guanajuatense llevó su trabajo de prevención, con buenos resultados, a comunidades como Los Lorenzos, Valenciana, Puentecillas o zonas marginadas como Las Bateas

A través de un cuestionario de 12 preguntas se está generando en la población femenina una forma práctica de acercarse a conocer más sobre el cáncer de mama y saber, de acuerdo a ciertos criterios que contiene el cuestionario, si son susceptibles de padecer esta enfermedad, que de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS) cada año se registran 1.38 millones de nuevos casos en el mundo.
La prevención, a través de la autoexploración de las mamas o senos, es el principal factor de éxito para detectar a tiempo, complementando con la mastografía, y llevar a cabo un tratamiento que permita evitar la muerte temprana de las mujeres afectadas.

De acuerdo a los parámetros de la Secretaría de Salud en el estado, la autoexploración debe darse a partir de los 20 años y hasta los 69 años de edad. Entre los síntomas a los que hay que prestar atención están el dolor, ardor, secreciones extrañas, protuberancias, venas crecientes, hendiduras, bultos internos, erosiones de la piel, hundimiento del pezón, huecos, asimetría y endurecimiento de los senos.
Para Lourdez Gazol Patiño es importante que la las mujeres guanajuatenses, del campo y la ciudad, estén bien informadas, con datos verídicos, de una forma entendible para poder tomar mejores decisiones. Pero sobre todo para ir desterrando mitos o ideas que no ayudan en la prevención de esta terrible enfermedad.
“Bien dice Einstein que es más fácil deshacer un átomo que una idea. El gran reto es empezar a decir sí me pasa, sí me puede pasar y tengo que apostarle a la prevención”, resume Gazol, quien está convencida de que el camino que han iniciado desde la Dirección de Atención a la Mujer Guanajuatense es el adecuado para ir cambiando mentalidades en favor de la prevención.
- Intervención fotográfica: Ruleta Rusa
- Fotos: Presidencia Municipal de Guanajuato