Donald Trump se está convirtiendo en una especie de nuevo villano mundial al sumar día con día nuevas calamidades contra el mundo con su modelo político que genera odio y miedo.

No conforme con lanzar al mundo a una guerra comercial, ahora Trump ha decidido que Estados Unidos abandone el Consejo de Derechos Humanos de la ONU tras las críticas a su nuevo y violatorio modelo de política migratoria ‘cero tolerancia’ que separa a padres de hijos.

En días pasados agencias como la AP y AFP revelaron las condiciones deplorables con que son tratados los niños migrantes, encerrados en grandes jaulas, a los que han separado de sus padres para la deportación.

En las últimas semanas se ha registrado poco más de 2 mil casos de niños migrantes separados de sus familiares al ser detenidos por la Patrulla Fronteriza

Los niños migrantes separados de sus padres en una gran jaula en Texas se cubren en el piso con papel aluminio para tener algo de calor.

Este trato indigno ha hecho que en México los candidatos presidenciales y el Gobierno México se pronuncien en contra de la política de Trump. A quien no le importan en lo más mínimo la queja de los mexicanos. Aunque el señalamiento de la ONU y el Consejo de Derechos Humanos criticando estas acciones violatorias a los derechos humanos ha generado la rabia de Trump que anunció, a través de su embajadora en la ONU, Nikki Haley, la salida inmediata de su país del Consejo.

“No dudamos que su creación fue con buena fe, pero tenemos que ser honestos: el Consejo de Derechos Humanos de la ONU es un pobre defensor de los derechos humanos (…) Estados Unidos lidera el mundo en asistencia humanitaria; no tomará lecciones de hipócritas”,”, dijo en una conferencia de prensa el secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, según reportan diversos medios internacionales.

La agresiva política migratoria de Trump ha dividido aún más a los republicanos que están enfrentados por acciones como esta, y personas como la ex Primera Dama republicana Laura Bush, han calificado de ‘cruel e inmoral’ la nueva política.

Vivo en un estado fronterizo. Aprecio la necesidad de reforzar y proteger nuestras fronteras internacionales, pero esta política de ‘cero tolerancia’ es cruel. Es inmoral. Y rompe mi corazón”, escribió Laura Bush en el diario The Washington Post, en una columna publicada el domingo pasado.

La ex Primera Dama comparó la política de Trump con la reclusión de los japoneses-estadounidenses durante la Segunda Guerra Mundial, a lo que se refirió como “uno de los capítulos más vergonzosos de la historia de Estados Unidos”.

Pese a los señalamientos y críticas en su contra, el Presidente de Estados Unidos se ha mantenido firme luego de señalar con puntualidad que no cambiará su forma de hacer las cosas.

Estados Unidos no será un campo de inmigrantes y no será un campo de acogida de refugiados. Lo que está ocurriendo en Europa y otros lugares, no lo permitiré, no bajo mi vigilancia”, ha dicho Trump.

  • Intervención fotográfica: Ruleta Rusa
  • Foto: AP