La red de redes parece que está en serios problemas tras las investigaciones en Estados Unidos y Reino Unido, donde se acusa a Facebook de filtrar datos privados a Cambridge Analytica para influir en campañas electorales.

El escándalo que involucra a la compañía de Mark Zuckerberg, actualmente con cerca de 2 mil millones de usuarios en el mundo, deriva de la investigación de la Comisión Federal de Comercio.

Los citatorios ya surtieron efecto y Facebook acepta que enviará a representantes a declarar voluntariamente en al seis comités de la Cámara de Representantes y del Senado de Estados Unidos, incluyendo los de Inteligencia y Asuntos Judiciales.

En tanto, el Parlamento británico ha solicitado la comparecencia Zuckerberg para que explique cómo la compañía adquiere y retiene los datos de amigos de un usuario y qué medidas utiliza para evitar su mal uso por terceros.

Ante el escándalo por filtración ilegal de datos las acciones de la compañía han sufrido ya una caída del 7 %, con pérdidas superiores a los 40 mil millones de dólares

Investigaciones periodísticas de los diarios The Guardian y The New York Times revelan que Facebook tuvo un papel importante en la proveeduría de datos a la compañía Cambridge Analytica, acusada de manipular los perfiles de 50 millones de usuarios con fines electorales. Facebook logró el consentimiento de 270 mil usuarios, pero se hizo de la ‘vista gorda’ cuando se comenzó a estudiar y a manipular  los datos de 49.7 millones de perfiles ‘extras’.

La empresa Cambridge Analytica es la responsable de haber llevado a cabo la proveeduría de datos para las campañas del Brexit y de Donald Trump a la Presidencia de Estados Unidos, de ahí el impacto de estas revelaciones. Ayer ante el escándalo mundial el CEO fue despedido.

Todas las respuestas oficiales que nos han dado hasta ahora han subestimado este riesgo y han sido engañosas”, ha expuesto el legislador inglés Damian Collins, quien encabeza la presidencia de la comisión parlamentaria que investiga la seguridad digital y las ‘fake news’ en el Parlamentro británico.

Facebook amenazó con llevar a juicio a los diarios The Guardian y The New York Times, pero ante las evidencias que comprometen su responsabilidad ha desistido. E incluso anunció que rompía todo vínculo con Cambridge Analytica. Es la primera vez que Facebook tendrá que dar cuentas, obligado por autoridades judiciales, sobre qué se hace con la información que recolecta, cómo la procesa, qué medidas tiene para su resguardo; y lo más importante: por qué la filtra a terceros sin el consentimiento de sus usuarios.